LOS ARQUEÓLOGOS egipcios comenzarán el próximo mes la restauración del coloso de Ramsés II, trasladado en agosto del centro cairota a la sede del nuevo museo egipcio, y que prevén que durará dos años. Los expertos han retirado de la estatua, de 83 toneladas y 11 metros de altura, el armazón de metal que la protegía desde su traslado, el 25 de agosto, y la han fijado sobre una base de cemento.