"Si estamos aquí es porque los españoles somos los últimos románticos de la cocina. Primero atendemos a la pasión y después el negocio. Muchas veces me han preguntado por qué no abro un Bulli en EEUU y la respuesta es porque entendemos la cocina de otra manera". Así cerró ayer Ferran Adri el encuentro con la prensa para presentar la cumbre gastronómica Spain´s 10: Cocina de vanguardia, que hoy comienza en Nueva York y que durante tres días demostrará que los fogones españoles "son la vanguardia mundial".

Junto al pope Adri desembarcaron el también catalán Joan Roca, el vasco Juan Mari Arzak, los madrileños Alberto Chicote y Paco Roncero, el alicantino Quique Dacosta, el malagueño Dani García, el navarro Enrique Martínez y el pastelero de Elda Paco Torreblanca. Una nutrida armada (a falta de Martín Berasategui, que no llegó a la rueda de prensa pero estará en las jornadas) para vender la gastronomía patria.

La cita fue en el antiguo French Culinary Institute, escuela de cocina con 23 años de historia que ahora se llama The International Culinary Institute y que comenzará a impartir clases de cocina española en el 2007. "Los americanos amamos el cambio, los nuevos sabores, y estamos deseando que llegue el jamón ibérico", dijo su fundadora, Dorothy Hamilton.

"Hace 15 años los americanos no sabían ni dónde estaba nuestro país y hoy todos admiten que estamos al lado de los mejores", dijo Adri .

INTERÉS POR ESPAÑA Por eso hasta el sábado presentarán, en palabras de Arzak, su cocina de autor en Nueva York, una ciudad que Roncero pisa por primera vez. A Martínez le sorprendió "el interés por España". A Dani García, la diferencia con su trabajo en Marbella. Chicote se quedó con la "inyección de frescura y fuerza" de la urbe. Dacosta se quejó de no encontrar tomates y chipirones. Por último, José Carlos Capel y Lourdes Plana, organizadores de la cita, cerraron el encuentro con las palabras del periodista de EL PERIÓDICO Pau Arenós: "La nuestra es una cocina tecnoemocional".