Benedicto XVI autorizó que el proceso para llevar a los altares a Juan Pablo II se iniciase sin esperar a que se cumplieran cinco años desde su muerte, como es preceptivo, pero el cardenal Saraiva reiteró ayer que no habrá más concesiones. Ello impedirá que Wojtyla sea beato el 2 de abril, tercer aniversario de su muerte.