Ahora está en vuestras manos", subrayó ayer un emocionado Nelson Mandela al celebrar su 90 cumpleaños con un macroconcierto en el Hyde Park londinense, donde pareció pasar el testigo de la lucha contra el sufrimiento humano.

"Decimos hoy, después de casi 90 años de vida, que ha llegado el momento de que nuevas manos soporten la carga. Ahora está en vuestras manos", dijo Mandela ante un público entregado, que se arrancó de forma espontánea a cantar "cumpleaños feliz" cuando el líder sudafricano hizo su aparición.

Con una fragilidad evidente --tuvo que ser ayudado para llegar hasta el escenario y apoyado en un bastón--, aunque sonriente, Mandela recordó a los asistentes que queda mucho trabajo por hacer, especialmente allí "donde hay pobreza y enfermedad, donde los seres humanos son oprimidos".

"Nuestra misión es lograr libertad para todos", subrayó el Premio Nobel de la Paz, quien regresó a la misma ciudad que acogió en 1988 un concierto en el estadio de Wembley para exigir su liberación, acto que se convirtió entonces en un emblema en la lucha contra el Apartheid.

"Vuestras voces cruzaron el mar y nos inspiraron en las celdas de nuestra prisión", aseguró Mandela en el concierto, celebrado bajo el lema Está en nuestras manos y cuya recaudación se destinará a la campaña del expresidente surafricano contra el sida.

El concierto en Hyde Park arrancó ayer con los sonidos emitidos por el músico armenio Jivan Gasparayan con su uduk, un instrumento antiguo parecido al oboe con el que hechizó al público, que integraban, según la organización, 46.664 espectadores. El número no es casual. Además de dar nombre a la fundación promovida por Mandela para concienciar de las consecuencias devastadoras del sida, 46664 es el número que tuvo Mandela en la prisión.