En España ejercen unos 22.000 médicos extranjeros -el 11 por ciento del total- y, de ellos, entre 9.000 y 12.000 son extracomunitarios que pueden carecer de una homologación de sus títulos o estar pendientes de ella, según datos de la OCDE.

Así lo ha puesto hoy de manifiesto la Organización Médico Colegial (OMC), en un documento consensuado por los representantes nacionales y provinciales de facultativos de toda España, que se han reunido este fin de semana en Madrid para denunciar las amenazas que se ciernen sobre este colectivo y sobre la salud de los pacientes.

En una rueda de prensa, han lanzado un "mensaje de alerta" a la población ante el intento de los ministerios de Sanidad y Educación de aprobar un Real Decreto para habilitar "sine die" a los médicos extracomunitarios hasta que concluya el proceso de homologación de sus títulos, que puede durar incluso más de tres años.

El doctor Jerónimo Fernández, representante de Atención Primaria Urbana, ha esgrimido que el departamento que dirige Bernat Soria quiere esquivar con este borrador la amenaza de la OMC de denunciar a los gerentes y consejeros autonómicos que contraten médicos sin la titulación de especialista correspondiente.

"Tratan de resolver un problema de titulaciones de médicos extracomunitarios por la vía rápida y de forma parcial, precipitada y discriminatoria", han denunciado, en lugar de suscribir medidas que eviten la emigración masiva de profesionales españoles a otros países europeos, donde su situación laboral es mucho mejor.

El representante de Médicos de Atención Primaria Rural, Josep Fumadó, ha esgrimido que en numerosas ocasiones estos inmigrantes ocupan plazas de especialistas con la sola homologación del título de licenciado en Medicina, mientras esperan la convalidación de una especialidad que, con frecuencia, luego se les deniega por no considerarlos aptos para ejercerla.

Los médicos se preguntan "cómo se puede explicar a los pacientes que han estado siendo atendidos por un especialista al que no se le reconoce su aptitud".

El doctor Manuel Sánchez, representante de Médicos de Hospitales, ha denunciado también el proyecto de directiva comunitaria que pretende aprobar el Parlamento Europeo, por el que se elevaría hasta 65 horas el tiempo de trabajo de los médicos.

"Un médico cansado puede ser un peligro para sus pacientes", ha explicado, al tiempo que ha recordado que el 7 por ciento de las visitas a urgencias se producen por errores médicos o efectos adversos en la medicación, un porcentaje que ascenderá cuando no estén en condiciones normales de alerta física y mental por no haber descansado.

Los facultativos se niegan a ser "los nuevos esclavos del siglo XXI" e informan de que acudirán el próximo día quince de diciembre a la manifestación convocada por este colectivo ante la Eurocámara.

Finalmente, han coincidido en criticar la denominada "prescripción enfermera" o la "atención farmacéutica" que otorgaría a estos colectivos la capacidad de prescribir medicamentos o de abordar problemas de salud que, según su criterio, implican el diagnóstico exclusivo de los doctores.

"No sólo nos jugamos el futuro, sino, sobre todo, la salud de los pacientes", ha concluido el secretario general de la OMC, Juan José Rodríguez Sendín.