El presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Antonio María Rouco, expresó ayer al presidente del Congreso, José Bono, el "malestar" de la Iglesia católica por la admisión a trámite de la iniciativa de ERC para reprobar las declaraciones del Papa durante su reciente viaje a África sobre el uso del preservativo.

La admisión a trámite de la iniciativa firmada por IU-ICV contra el Papa Benedicto XVI "ha causado un gran malestar en las altas esferas de la Iglesia, pero también dentro de las filas del PP, por la división que se produjo entre sus representantes cuando se calificó este asunto en la última reunión de la Mesa".

El también arzobispo de Madrid, advirtió a Bono en la conversación telefónica que no le llamaba como amigo, sino como máximo representante de la Iglesia en España.

La iniciativa de IU-ICV dice que "El Congreso de los Diputados expresa su consternación y rechazo ante las declaraciones del Papa Benedicto XVI en las que señalaba que no se puede superar (el sida) con la distribución de preservativos, al contrario aumentan el problema".

Además, insta al Gobierno a "protestar por vía oficial y diplomática, a través de nuestro embajador ante la Santa Sede, contra las declaraciones realizadas por Benedicto XVI en su reciente viaje a África, declaraciones que perjudican los compromisos de la comunidad internacional y los esfuerzos de la comunidad científica en lucha contra la propagación del sida".

El Parlamento belga aprobó a mediados de abril una resolución en la misma línea pidiendo al Gobierno de Bélgica que "condene las declaraciones inaceptables del Papa en su viaje a África".