La cantante colombiana Shakira, novia del jugador del Barcelona Gerard Piqué, ha asegurado este martes en Jerusalén ante el presidente de Israel, Simón Peres: "Me gustaría un mundo que funcionara como un equipo, tal y como el Barça lo hace. De esta manera podremos ganar el partido contra la discriminación", ha dicho en un rueda de prensa mientras Gerard Piqué observaba desde la primera fila. Shakira tuvo otra mención al club catalán al recordar que parte de los centenares de niños judíos y árabes que la recibieron en un colegio bilingüe de Jerusalén vestían camisetas del Barcelona. "Esta visita es una oportunidad para resaltar la importancia de cómo criar a nuestros hijos. Lo bueno con la educación es que no hacen falta cincuenta o cien años para ver los resultados, sino que se pueden ver todos los días de forma inmediata", ha señalado. El octogenario Peres ha protagonizado la anécdota de la jornada al llamar "Sharika" a la exitosa artista de Barranquilla, que le corrigió con educación. Peres ha argumentado enseguida que se había confundido porque pretendía establecer un paralelismo entre el nombre de la cantante y una palabra griega. Shakira participa en la sesión inaugural de un foro de conferencias auspiciado por Peres titulado denominado "Enfrentando el mañana 2011", iniciativa que aborda entre otros asuntos estrategias para garantizar la protección y educación en la infancia. La fundación de Peres tiene firmado sendos acuerdos de colaboración tanto con la Fundación FC Barcelona como con la fundación de Shakira, "Pies Descalzos", destinadas a promover la educación y formación de los niños en valores como el deporte. Por la mañana, Shakira fue recibida con grandes muestras de júbilo por centenares de niños que le cantaron el Waka-Waka (canción oficial del Mundial) en un acto en el patio del colegio organizado por UNICEF. La cantante, que acudió al centro sin la compañía de Piqué, se mezcló entre los pequeños, muchos de los cuales lucían camisetas azulgranas, y no dudó en abrazar y saludar a todos los que pudo al tiempo que se sentó entre ellos en primera fila para poder ver la actuación. La artista y su novio se encuentran desde el lunes en Jerusalén, donde tuvieron ocasión de visitar la ciudadela antigua y el Muro de las Lamentaciones.