La Audiencia de Barcelona ha condenado al yerno de los joyeros Tous, Lluís Corominas, a pagar 310.000 euros de indemnización a los familiares del ladrón, al que mató de un disparo en diciembre de 2006, cuando presuntamente intentaba entrar a robar en la casa de sus suegros. En su sentencia, la magistrada Concepción Sotorra absuelve a Corominas de cualquier responsabilidad penal en el homicidio del supuesto asaltante, de acuerdo con el veredicto del jurado popular que lo juzgó, pero le fija una responsabilidad civil de 310.000 euros por la muerte del ladrón, cantidad superior incluso a la solicitada por la Fiscalía. La responsabilidad civil fijada por la sentencia, de la que habría que descontar los 150.000 euros que Corominas pagó a la familia del ladrón a los tres días de su muerte, se la repartirían la esposa y el hijo de la víctima, con 250.000 euros en total, y sus padres. La magistrada presidenta del tribunal popular que juzgó a Corominas suscribe en su fallo los argumentos esgrimidos por la acusación particular ejercida por la familia de la víctima, al considerar que el yerno de los Tous está obligado a pagar una indemnización dado que sería "injusto" que los perjudicados se vieran privados de un resarcimiento por una conducta errónea del acusado.