El asesino confeso de Marta del Castillo, Miguel Carcaño, ha negado hoy la violación de la joven y ha atribuido su muerte a un accidente cuando la golpeó con un cenicero en la cabeza tras una discusión.

En la segunda sesión del juicio que se celebra en la Audiencia de Sevilla, Carcaño ha vuelto a una de sus primeras declaraciones y ha atribuido la muerte de Marta a que se puso nervioso y se enfadó cuando la víctima le reprochó su nueva relación sentimental y le pidió que volviese con ella.

"Nos acaloramos, había un cenicero encima de la mesa del ordenador y le di un golpe", ha explicado Carcaño a preguntas del fiscal, en una declaración con mucha frialdad y sin aparentar ningún nerviosismo.