Un grupo de investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) ha calculado que entre los días de Nochebuena y Navidad ingerimos alrededor de 7.000 kilocalorías cuando la cantidad recomendada diaria es de entre 2.000 y 2.500 kilocalorías.
La investigadora Purificación García Segovia, quien trabaja en el Departamento de Tecnología de Alimentos de la UPV, recomienda controlar las cantidades y el tipo de comida que preparamos en estas fechas, en las que “resulta imposible no comer más de lo normal”. La experta asistió a la preparación de un menú navideño en las instalaciones del Valencia Club Cocina.
Los consejos se centran básicamente en escoger de forma adecuada los alimentos, por ejemplo, eliminar la nata de las comidas o sustituir los postres de chocolate y crema por macedonia de frutas. “Para espesar las salsas se puede utilizar un yogur en vez de nata con lo que conseguimos reducir mucho las calorías de las comidas”, aseguró García Segovia.
Otra de las recomendaciones de esta investigadora es “mantener una buena hidratación” ya que durante las navidades se consume más alcohol de lo que es habitual, un producto que según afirma García, es “muy deshidratante” por tanto hay que cuidar este punto. Asimismo, esta especialista rechaza “por completo” la idea de seguir una dieta después de las vacaciones, ya que tras el periodo de descanso vienen los días laborables en los que hay que mantener un nivel adecuado de alimentación.
García aseguró que el “menú perfecto no existe” aunque ha apostado por incluir en los ágapes navideños platos típicos como el puchero valenciano, con el que se consigue reducir el nivel calórico de las comidas.
El menú que prepararon los alumnos del Valencia Club Cocina consistió en una ensalada de calamares, carne de ciervo laminada con calabaza frita y salsa de mostaza y, como postre, un coulant de chocolate. H
