El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, defendió ayer en el Congreso la actuación “ejemplar” que tuvieron los antidisturbios de la Policía Nacional durante los incidentes de Valencia el pasado febrero. Fernández Díaz, que al día siguiente de la acción admitió que se habían cometido “excesos”, explicó ayer que la investigación realizada por su propio ministerio concluye, en cambio, que la actuación policial fue “intachable” y que por tanto, ningún agente será expedientado. La mayoría de grupos de la oposición lamentaron la falta de autocrítica del ministro y pidieron el cese de la delegada del Gobierno en Valencia, Paula Sánchez de León, y del jefe Superior de Policía, Antonio Moreno.

En cualquier caso, Fernández Díaz también advirtió de que si los procesos judiciales abiertos contra los agentes tras las denuncias de algunos manifestantes “llegasen a otras conclusiones, se acatarían”. La delegada del Gobierno encargó la investigación interna tras el aluvión de críticas recibidas por al actuación policial que se consideró de abusiva y desproporcionada. El ministro también ha anunciado que tras algunas críticas recibidas sobre el hecho de que algunos antidisturbios estuvieran sin identificar, se elaborará una nueva norma que regule este tipo de situaciones.

En su intervención, Fernández Díaz reiteró las intervenciones que ofreció en los días posteriores a los disturbios. Y volvió a reconocer que las palabras del jefe superior de Valencia calificando a los estudiantes como “el enemigo” no fueron afortunadas. Por lo demás, hizo hincapié en el riesgo que está generando un grupo radical de antisistemas “violento” que según el ministro está asentado en Valencia y es el foco de buena parte de los problemas.

El portavoz del PSOE, José Luis Ábalos, advirtió de que hubo manifestaciones antes del día 13 “y no pasó nada hasta que irrumpió la policía con instrucciones políticas”. “Usted habla de una sola carga, pero no fue una carga, fue una batalla”, añadió Ábalos quien censuró al Gobierno porque le preocupe más la imagen exterior de España que los heridos.

Por parte de IU, Ricardo Sixto calificó la intervención del ministro “previsible” y a su juicio fue “una larga excusa”. “Cuando se produjo la primavera de Praga, el PCE la condenó mientras ustedes eran ministros de la Dictadura de Franco”, le espetó.

El diputado de UPyD, Toni Cantó, defendió el cese del jefe superior de Policía de Valencia porque, a su juicio, ha transmitido una mala imagen. H