Rectificar, aunque sea poco, también es de sabios. El ministro de Educación, Cultura y Deportes, José Ignacio Wert, debió tener ayer presente la vieja máxima e introdujo ligeros retoques en una política educativa que le han valido ser el miembro peor valorado del Gobierno. El plante de 75 rectores evidenció el miércoles el malestar y la gran distancia que separaban a la comunidad educativa de la persona que, en teoría debería defender sus intereses ante el Ejecutivo. Posiblemente sabedor de que ya son demasiados los incendios provocados en solo cinco meses, Wert mostró ayer un leve, aunque sintomático, cambio de talante. Se avino a eliminar, a petición del País Vasco y Cataluña, la mención a los “nacionalismos excluyentes” que se había incluido en el temario de Educación para la Ciudadanía. Aceptó mantener la nota mínima para obtener una beca en educación no universitaria en el 5 actual e hizo un gesto a los rectores para volver a sentarse y recuperar el diálogo roto.

MÁS DIÁLOGO // La secretaria de Estado de Educación, Monserrat Gomendio, que compareció en lugar del ministro ante los medios para transmitir una imagen más condescendiente, aseguró que el Ministerio no se planteó que un concepto “incluido en el apartado de conflictos a nivel mundial”, pudiese “herir la sensibilidad de ninguna comunidad autónoma”. Sin embargo el temario mantiene la eliminación de cuestiones como la referencia a los afectos, al rechazo a los prejuicios racistas, sexistas u homófobos, las relaciones entre hombres y mujeres o la pobreza y la discriminación provocada por las desigualdades sociales económicas. Unos aspectos que siguen sin gustar a las consejeras del País Vasco, Isabel Celaà (PSE); Cataluña, Irene Rigau (CiU) y de Andalucía, Mar Moreno (PSOE). A la rebelión contra la asignatura se unió incluso la consejera de Madrid, Lucía Figar (PP) que propuso directamente la retirada de una materia “que ha dado tres años de dolor de cabeza nacional” y que quita “un tiempo precioso a materias troncales como lengua, matemáticas e inglés”. “Hay que suprimirla, tenemos problemas gravísimos”, sentenció Figar.

CAMBIO DE CRITERIO // El departamento de Wert también cedió o cambió su criterio en la nota de corte para la concesión de becas, de forma que solo para la becas salario (que incluyen ayudas generales y un sueldo mensual para los estudiantes) se exigirá un 6 y para las generales, de material o de trasporte se mantendrá el 5 actual. Algunas comunidades lo había reclamado sobre todo para los becados en FP. El departamento que dirige Wert se ha comprometido al cambio. No obstante, las becas universitarias, que incluyen un endurecimiento de los requisitos académicos, entre 5,5 y 6, se tratarán en conferencia sectorial la próxima semana.

Aunque el ministro mantiene sus decretos con férreos recortes económicos, su departamento anunció que convocará de nuevo a los rectores la próxima semana con el mismo orden del día que el frustrado el miércoles, pero les citará para las próximas semanas para debatir el decreto de los recortes que ellos pedían. H