El casco del crucero 'Costa Concordia' ha quedado enderezado pasadas las 04.00 horas de la madrugada de este martes culminando así con éxito las operaciones para reflotar el buque, según ha confirmado el jefe de Protección Civil, Franco Gabrielli. "El barco está ahora apoyado sobre la plataforma y hemos marcado un punto decisivo para alejarlo de la isla de Giglio", ha destacado Gabrielli.

Los técnicos que han dirigido la operación han asegurado que "no ha habido bomba ecológica" --en alusión al temor de que se produjera alguna fuga-- y han advertido de que el flanco del casco requerirá "intervenciones importantes".

Una cerveza y a dormir

El director de las operaciones de rotación del crucero, Nick Sloane, ingeniero sudafricano de 52 años, ha explicado que "si se piensa en todo aquello que había en este proyecto, entre electrónica y acero, llegas a la conclusión de que pocos países del mundo hubieran podido conjuntar en tan poco tiempo una operación tan vasta". "Hay muchos daños en el barco y habrá que hacer comprobaciones", ha añadido, "pero me siento aliviado, un poco cansado y con la intención de tomar una cerveza y marcharme a dormir".

La operación para reflotar la nave empezó el lunes y se han prolongado toda la noche. Hasta pasada medianoche, los técnicos habían conseguido un enderezamiento de entre 18 y 19 grados, de los 65 necesarios. El punto crítico ha sido el momento en que se alcanzaran los 24 grados. En ese momento, los 36 gatos hidráulicos que, como unos tirantes, levantan el casco desde las nueve de la mañana del pasado jueves, tenían que dejar de funcionar para permitir que se terminara la labor de enderezamiento usando el agua como lastre y la gravedad natural.

Remolcado a puerto

El proyecto preveía que, al alcanzar una inclinación de 24 grados, los 15 depósitos herméticos de flotación, ya colocados a un lado, empezaran a llenarse de agua, lo que facilitaría que la nave se enderezara y se deslizara lentamente hasta el lecho marino, formado por unas plataformas subacuáticas.

Una vez estabilizado el crucero, los técnicos han colocado otros 15 depósitos en el lado contrario. Tras inspeccionar la nave, naufragada en enero de 2012 y en la que murieron 32 personas --dos aún se encuentran desaparecidas--, los 30 depósitos herméticos serán vaciados, operación que debería propiciar el reflotamiento del crucero. Estas últimas operaciones tendrán lugar hacia la primavera y después la nave será remolcada a un puerto para proceder a su desguace.