El 100% de los casos de cáncer de cuello de útero son causados por el virus del papiloma humano (VPH), un tumor que se podría "erradicar" en España en los próximos 30 años gracias a la vacunación sistemática de las niñas, "la mejor prevención primaria" que existe frente a este virus.

Así lo ha asegurado este miércoles el doctor Daniel Andía, jefe de la sección de ginecología del Hospital Universitario de Basurto (Bilbao), en un encuentro informativo organizado por la compañía farmacéutica Sanofi con motivo del Día Europeo de la Salud Sexual, en el que ha advertido de que el 75% de la población entrará en contacto con el VPH a lo largo de su vida.

Un virus altamente contagioso, mayor que el VIH, de fácil transmisión por contacto genital, que afecta por igual a hombres y mujeres y que, además de cáncer de cuello de útero, es responsable del cáncer anogenital, orofaríngeo y de pene, y de las verrugas genitales.

En España, la sanidad pública financia la vacunación de las niñas de 12 años y, aunque la tasa de vacunación es alta -en torno al 80%-, las diferencias entre comunidades son notables: van desde el 90% en el Catalunya o el País Vasco a menos del 50% en Andalucía.

Además, la vacunación frente a este virus en personas adultas apenas alcanza el 5%, lo que se debe a que los ginecólogos no lo recomiendan de manera habitual y a su elevado precio (entre 120 y 150 euros cada una de las tres dosis necesarias).

Aunque la mayor prevalencia del VPH se da en mujeres de entre 18 y 25 años, las lesiones precancerosas no aparecen hasta diez o quince años después del contacto con el virus, y el cáncer de cuello de útero se da mayoritariamente entre los 45 y 50 años.

Por ello, según el doctor Andía, habrá que esperar unos 30 años para comprobar los efectos de la vacunación sistemática de las niñas en la reducción de ese tipo de tumores, aunque en algunos países como Estados Unidos existen ya estudios que demuestran una reducción de hasta el 90% de las verrugas genitales y de un 50 % de las lesiones precancerosas en pacientes vacunados.

Mujeres jóvenes profesionales con movilidad internacional, veinteañeras, mayores de 45 años sin pareja estable y hombres solteros de hasta 55 años que no tienen una relación estable son los perfiles con mayor riesgo de infectarse por el VPH, según la experiencia que se tiene en consulta.

Para todas estas personas, los profesionales aconsejan la vacunación, al igual que para todos aquellos que ya se han infectado, porque están más predispuestos a tener nuevas lesiones. En algunas comunidades se financia la vacuna para este grupo de población.