Las tornas han cambiado. El sector del taxi consiguió un giro del Gobierno favorable a sus intereses con las movilizaciones masivas del pasado julio y el de los vehículos de transporte con conductor (VTC) se dispone a emularlo en vísperas de la aprobación el viernes del decreto que puede suponer su «muerte», en palabras de sus dirigentes. El pulso empezó ayer con una oferta de viajes gratis y seguirá hoy con un corte de tres horas de la avenida de la Castellana, en Madrid, frente al Ministerio de Fomento.

El decreto que aprobará el Consejo de Ministros trasladará a las comunidades autónomas y ayuntamientos la responsabilidad de regular las VTC, operadas por las plataformas Uber y Cabify, lo que en la práctica significará que tendrán que solicitar una segunda licencia a estas administraciones. Estas podrían denegarlas hasta que se alcance la proporción 1/30 de VTC/taxis, la que exige la actual ley de ordenación del transporte aprobada en el 2015 por el Gobierno del Partido Popular y que nunca ha llegado a cumplirse. Los municipios de Madrid y Barcelona ya han mostrado su intención de imponer ese ratio.

EMPLEOS EN PELIGRO // La decisión podría suponer la desaparición del 80% de la flota, dado que actualmente la ratio media es de 1/6 (11.200 frente a 65.000) y en Madrid llega a ser de 1/3. Unos 15.000 empleados (autónomos o por cuenta ajena) se quedarían en la calle, según denuncian sus dirigentes. Eso sin tener en cuenta que miles de licencias están pendientes de recursos judiciales que previsiblemente se fallarán a favor de las nuevas VTC.

La primera medida de protesta, la gratuidad del servicio durante 12 horas, fue promovida por la patronal Unauto, en el marco de una campaña de publicidad y márketing bajo el lema #EnElFuturoCabemosTodos. Los convocantes resaltaron a las pocas horas el éxito de la iniciativa, al haber sido seguida por un 90% de los conductores, según sus datos.

La movilización de hoy no está convocada por las plataformas ni por la patronal sino por una organización de conductores, la Asociación de autónomos de las VTC, Cuenta, además, con el apoyo del Sindicato Libre de los trabajadores del transporte.

El sindicato convocante calcula que pueden reunir unos 2.000 coches y más de 3.000 personas en todo el recorrido, colapsando los ocho carriles de la Castellana durante tres horas. La manifestación comenzará a las 11.00 horas. «Queremos demostrar que tenemos tanta fuerza de movilización como el taxi», advirtió José Antonio Parrondo, uno de los principales empresarios de las VTC.

No es descartable que ocurran incidentes, ya que algunos sectores del taxi hacen la guerra por su cuenta con agresiones a VTC y sus conductores. El sector denunció que la madrugada del miércoles aparecieron una veintena de coches con ventanillas rotas o ruedas pinchadas en el barrio madrileño de Villaverde.