Un estudio de la Universidad de Granada ha calculado que cinco millones de personas dejan cada día su confinamiento en España para salir a comprar, un dato que podría dificultar la batalla contra el coronavirus y que contrasta fuertemente con la apuesta por el comercio electrónico de los países asiáticos.

El grupo de investigación Innovación, Sostenibilidad y Desarrollo Empresarial (ISDE) de la Universidad de Granada (UGR) ha comparado los sistemas de compras de la población en España durante el periodo de confinamiento y los de otros países que han conseguido contener la enfermedad para intentar encontrar guías de referencia. Este análisis ha tenido como marco el esfuerzo y el comportamiento de empleados de supermercados y de comercios para responder a la alta demanda de consumo del inicio de la cuarentena y los protocolos diseñados para trabajar con medidas de seguridad.

Según el grupo de investigación, España tiene unas 2.500 tiendas de alimentación y supermercados dispersos por su geografía, una cifra que unida al consumo les ha hecho calcular que unos cinco millones de personas cada día acudirían a hacer sus compras. Se trata de un dato «preocupante» que conjuga con el papel del comercio electrónico, ventas por internet que han jugado un papel crucial para reducir la expansión de la infección en Asia, pero que en España tiene un papel simbólico.

control // El comercio on-line evita acudir a espacios donde hay concentración de personas y posibilita una gestión más controlada de la venta frente a la compra tradicional, que pone en riesgo el esfuerzo del confinamiento durante muchos días. Aunque se puedan tomar medidas para reducir el riesgo en el punto de venta, los expertos han destacado que la medida más eficaz sería que el cliente no necesitara acudir al punto de venta o, en su defecto, que pasara el menos tiempo posible recogiendo su compra.

El estudio ha comparado la cifra de clientes on-line de países como China o Japón, con zonas en las que la mitad de las compras se hacen por internet, con las de países europeos, que se acercan al 40%, o España, con una media que no llega al 20%. Por ello, el equipo de trabajo ha propuesto como medidas urgentes fomentar al comercio en línea o bajo pedido, regular la gestión de tiendas, aprobar protocolos de comportamiento y dar prioridad a personas vulnerables.