Naciones Unidas reclamó ayer a la comunidad internacional un paquete de 2,5 billones de dólares (cerca de 2,3 billones de euros) para apoyar a las economías de los países en desarrollo ante el impacto de la pandemia de coronavirus, que describe como un «tsunami».

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo recordó que dos tercios de la población mundial viven en países en desarrollo, excluyendo a China, y resaltó que hacen frente a «un daño económico sin precedentes» a causa de la crisis; y que este paquete económico permitiría a estos países «convertir las expresiones de solidaridad internacional en una acción global significativa».

El organismo defendió que para hacer frente a la crisis sanitaria y económica generada sería necesaria una estrategia con cuatro puntos, empezando por la inyección de un billón de dólares (unos 907.000 millones de euros) en liquidez en estos países.