La popular 'estrella de Belén' o estrella de la Navidad' que guio a los Reyes Magos hasta el portal de Belén se podrá ver el próximo día 21 y durante toda la semana por primera vez desde hace 800 años. Según los escritos, los sabios viajaron siguiendo la estrella y esta se detuvo sobre el lugar en el que Jesús había nacido.

El motivo es que el 21 de diciembre se producirá el solsticio de invierno y con él llegará un evento único en ocho siglos. El solsticio de invierno corresponde al instante en que la posición del Sol en el cielo se encuentra a la mayor distancia del ecuador celeste.

En este caso, Júpiter y Saturno se alinearán tan cerca que parecerán una sola estrella en el firmamento, lo que producirá ese efecto de astro resplandeciente. Los astrónomos explican que este espectáculo no se volverá a ver hasta 2080 y recomiendan emplear un telescopio para poder apreciarlo mejor.

La última vez que esto sucedió fue en la Edad Media, en el año 1226, cuando aún se creía en Europa que la Tierra era plana y la conquista de América estaba a siglos de distancia. Y aunque a la vista da la sensación de ser una estrella gigante, lo cierto es que la conjunción de ambos planetas provoca esta ilusión óptica desde la Tierra. Y parece que sea una sola estrella que brilla al unísono. Pero en realidad, Júpiter y Saturno orbitan alrededor del Sol separados por una distancia similar a la que existe entre la Tierra y Júpiter, sin que nunca lleguen a tocarse.

"Las alineaciones entre estos dos planetas son bastante raras, ocurren una vez cada 20 años aproximadamente, pero esta conjunción es excepcionalmente rara debido a lo cerca que se verán los planetas entre sí", ha asegurado en un comunicado el astrónomo de la Universidad Rice Patrick Hartigan. "Habría que retroceder hasta justo antes del amanecer del 4 de marzo de 1226 para ver una alineación más cercana entre estos objetos visibles en el cielo nocturno".

Júpiter y Saturno se han estado acercando en el cielo de la Tierra desde el verano. Del 16 al 25 de diciembre, los dos estarán separados por menos del diámetro de una luna llena. "En la noche de mayor aproximación, el 21 de diciembre, se verán como un planeta doble, separados solo por una quinta parte del diámetro de la luna llena", afirma Hartigan, profesor de física y astronomía. "Para la mayoría de telescopios, cada planeta y varias de sus lunas más grandes serán visibles en el mismo campo de visión esa noche".

Mejor observación cerca del ecuador

Aunque las mejores condiciones de observación estarán cerca del ecuador, el evento se podrá observar en cualquier lugar de la Tierra, si el clima lo permite. Hartigan dijo que el dúo planetario aparecerá bajo en el cielo occidental durante aproximadamente una hora después del atardecer cada noche.

"Cuanto más al norte esté un espectador, menos tiempo tendrá para vislumbrar la conjunción antes de que los planetas se hundan bajo el horizonte", ha dicho. Afortunadamente, los planetas serán lo suficientemente brillantes como para ser vistos en el crepúsculo, que puede ser el mejor momento para que muchos espectadores estadounidenses observen la conjunción.

"Para cuando los cielos estén completamente oscuros en Houston, por ejemplo, la conjunción estará a solo 9 grados sobre el horizonte", dijo Hartigan. "Ver eso sería manejable si el clima coopera y tiene una vista despejada hacia el sudoeste".

Pero una hora después de la puesta del sol, las personas que miran hacia el cielo en Nueva York o Londres encontrarán los planetas aún más cerca del horizonte, a unos 7,5 grados y 5,3 grados respectivamente. Los espectadores allí, y en latitudes similares, harían bien en echar un vistazo a la rara vista astronómica tan pronto como sea posible después del atardecer, ha añadido el físico y astrónomo.

Después de este diciembre, Júpiter y Saturno no volverán a estar tan cerca y tan alto -y, por lo tanto, tan visibles- en el cielo nocturno hasta el 15 de marzo del 2080, según Hartigan. Y después, la pareja no hará tal aparición hasta algún tiempo después del año 2400.