Cerrar heridas. Poder vivir el duelo para superarlo. Llamar a las cosas por el nombre que permite la perspectiva histórica. Esa es la filosofía de la Ley de Memoria Democrática tanto a nivel nacional como regional. En base a esa normativa, se llevan a cabo diversas actuaciones en la comunidad, entre ellas, la búsqueda y apertura de fosas comunes de represaliados durante la Guerra Civil y el franquismo.

Este verano el Gobierno quiso acelerar el rescate de cuerpos y puso en marcha un nuevo plan de choque de exhumaciones con ayudas para 189 fosas más y un total de 303 proyectos. En Extremadura son diez puntos en los que se va a actuar, siete de ellos están en la provincia de Badajoz y tres en la de Cáceres.

El listado

De este modo, en el listado del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, encargado de esta materia, aparece la fosa de Valencia de Alcántara, donde se realizarán labores de prospección, exhumación y análisis de restos. También se recoge en el listado la de Alcúescar, donde habrá tareas de investigación, de recogida de testimonios, exhumación y análisis de restos.  

Ya en la provincia pacense, las actuaciones serán en la de Fuentes de León (con investigación, recopilación de testimonios, prospección, exhumación y análisis de restos); en la de Santa Amalia (prospección, exhumación y análisis de restos); en la de Cabeza la Vaca (exhumación y análisis de restos); en Herrera del Duque (recopilación de testimonios); y en la de Campillo de Llerena (prospección). 

Además de la intervención en estas siete fosas, se desarrollarán tres proyectos, dos en territorio pacense y otro más en la provincia de Cáceres.

El primero está localizado en Fregenal de la Sierra, y consiste en la intervención arqueológica para la exhumación de las fosas comunes del cementerio municipal.

El segundo es en Badajoz, ya está en marcha, y lleva este nombre: ‘Localización y delimitación de los lugares de enterramiento de las víctimas de la represión franquista en el departamento 4 del cementerio de San Juan’. 

Y el tercero, en la localidad de Zarza la Mayor, consiste igualmente en la intervención arqueológica para la exhumación de las víctimas enterradas en la mina de La Paloma.

Acuerdo para traer restos de represaliados extremeños localizados en el penal de Formentera

Son 58 víctimas mortales del penal franquista de la Savina, en Formentera, que sufrieron la represión entre 1941 y 1942. Y la mayoría son extremeñas. Así lo han desvelado las actuaciones que se están llevando a cabo ahora en el cementerio nuevo de Sant Francesc Xavier de esta isla. El objetivo es conseguir una compilación de muestras de ADN adecuadas para comparar con los restos humanos que se puedan recuperar y así poder establecer identificaciones, de cara a devolver los cuerpos.

Es el acuerdo entre el Gobierno de las Islas Baleares y la Junta de Extremadura tras la reunión del pasado viernes, en la que estuvieron presentes el jefe de servicio de Memoria Histórica y Democrática de la Junta, Javier Jiménez Ávila; y la técnica del Proyecto de Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (Premhex), Candela Chaves.

Desde la Administración regional se llevará a cabo una metodología de trabajo para poder desarrollar el proceso de identificación a través del Instituto de la Memoria Histórica y Democrática, en colaboración con ayuntamientos de la región, asociaciones memorialistas, el Consejo de Comunidades Extremeñas en el Exterior y el Premhex.

La actuación prevista en el cementerio nuevo de Sant Francesc Xavier es fruto del estudio histórico elaborado por Antoni Ferrer, que da por definitiva la cifra de 58 víctimas mortales del penal de Formentera entre 1941 y 1942, y define tres lugares de este cementerio donde se pueden llevar a cabo intervenciones viables para tratar de localizar restos.

Las tareas de excavación y exhumación irán a cargo de la Sociedad Aranzadi, que ya ha avanzado que su plan incluye tres zonas en las que varios testigos apuntan que se produjeron los entierros, siendo algunas más viables que otras. Además, el equipo estará formado por algunos miembros que ya trabajaron en otras excavaciones similares.