El hotel sigue en pie y abandonado. Pero, a pesar de que los baños termales dejaron de darse en los años 70, el antiguo balneario de El Rincón, en Las Palmas de Gran Canaria, mantiene un hito histórico, ya que de sus galerías con enormes propiedades curativas surgió el único medicamento nacido de un agua minero medicinal español, que fue patentado en Alemania bajo el nombre de Rincopyn. El catedrático y director del Instituto de Hidrología y Climatología Médicas de Canarias de la Universidad Fernando Pessoa-Canarias de Guía, Eduardo Navarro, acaba de presentar un estudio científico sobre las propiedades de este fármaco en el congreso de la Feria Internacional del Turismo Termal, Salud y Bienestar (Termatalia), celebrado en la localidad gallega de Orense, que se clausuró con 6.300 visitas, y en el que participan expertos nacionales e internacionales.
"Rincopyn, el único medicamento obtenido de un agua minero medicinal española. Balneario de El Rincón (Gran Canaria), Islas Canarias". Este es el título de la ponencia presentada por el doctor Navarro en el Congreso de la Sociedad Española de Hidrología Médica, dentro de la feria, en el que expusieron sus trabajos especialistas y profesores universitarios de Italia, Francia, Suiza, Portugal y España, y que se presentó como "la capital mundial del turismo termal".
Eduardo Navarro defendió un hito histórico y exclusivo de las aguas minero medicinales del Manantial Cristo-Rincón, situado en la playa de El Rincón de la capital grancanaria. Y que tuvo su origen bajo el pequeño hotel de dos plantas construido entre 1930 y 1931, siendo proyectado por el arquitecto Miguel Martín Fernández. En sus dos plantas contaba con 10 tinas para que los huéspedes se dieran los baños termales. Y en él se alojaban numerosos turistas, sobre todo alemanes e ingleses.
Su propietario era el doctor A. Yánez (1875-1964), nacido en Maspalomas, que se rodeó de prestigiosos médicos locales y extranjeros, según el investigador.
Las propiedades terapéuticas de las aguas de El Rincón son diversas. Destacan por vía hidropínica (oral) su uso en hipoclorhidrias por su actividad estimulante de la secreción gástrica de ácido clorhídrico, de jugo gástrico y secreción pancreática. A su vez, aumenta la alcalinidad de la sangre y el incremento del peristaltismo gastrointestinal.
Eran muy usadas en casos de estreñimientos, por su actividad laxante
También sobresalen en diversos tipos de oliguria por su actividad diurética. Eran muy usadas en casos de estreñimientos, por su actividad laxante; al igual que en la gota, por su actividad uricosúrica.
Con respecto a su indicaciones terapéuticas por vía tópica (en la piel por la balneación), destacan las siguientes: se comportan como tónicos del sistema nervioso y cardiovascular, y aumenta la hemoglobina y hematíes cuando se encuentran disminuidos. Los análisis reflejan que también favorecen el metabolismo general y aumenta la eliminación de urea y ácido úrico, y regulan las funciones menstruales, además de usarse en la cura de heridas por su actividad cicatrizante.
Todo ello animó a unos alemanes a estudiar su posible aprovechamiento farmacológico. Entre otros, sus propiedades fueron analizadas por Penzol, Zmitz, Linke, Hermann, Mascías y Gautier.
Los fármacos fueron patentados en Alemania
El profesor en Hidrología detalla que en 1930 empresarios e investigadores alemanes visitaron el balneario. Una vez ahí «observan la calidad de sus aguas y la gran asistencia de pacientes». Recogen documentación analítica y clínica del Instituto de Higiene de Las Palmas. Y embotellan adecuadamente cantidades importantes de agua, que se llevan consigo a Berlín.
En la ciudad alemana realizan nuevos estudios analíticos y clínicos. El resultado les deja sorprendidos, por lo que deciden patentar los medicamentos, y encargan al fabricante Otto Dittres su fabricación en serie en Berlín.
El director de Hidrología apunta a la existencia de otro derivado de sus aguas, el Rincogono
Los inversores obtuvieron de las aguas minero medicinales de El Rincón dos medicamentos denominados Rincopyn y Rincogono, a través de estudios analíticos, preclínicos y clínicos. Ambos se patentaron en Alemania en 1932, y se comercializaron en polvo, agua y píldoras.
Eduardo Navarro se centró en el Rincopyn, porque es el fármaco del que tiene una información más completa, apareciendo en el Vademecum de productos farmacéuticos y organoterapéuticos.
Rincopyn estaba en todas las farmacias de Alemania y también se vendió en el balneario canario. El doctor ha podido comprobar que permaneció en las boticas alemanas al menos hasta el año 1939, ya que le pierde la pista tras la Segunda Guerra Mundial. Y en Canarias se siguió dispensando hasta el cierre del balneario.
Las aguas de El Rincón se consideraron minero medicinales desde principios del siglo XX, cuando fueron descubiertas por pescadores y caminantes. Fueron utilizadas, recuerda Eduardo Navarro, durante las tres primeras décadas del siglo pasado por personas que decían que al beberlas sentían una mayor energía en su cuerpos y les facilitaba la digestión de las comidas.
Por Orden Ministerial se concede la autorización para la apertura y funcionamiento del balneario de El Rincón e instalaciones de embotellado el 30 de junio de 1932, obteniendo un gran éxito de visitantes.
El hotel termal, al que acudían muchos turistas, funcionó hasta los años 70 del siglo pasado
En la actualidad, aunque el balneario fue destruido con la construcción hace unas décadas de la autovía del norte (GC-2), las aguas que lo surtían permanecen en el interior de los terrenos próximos, y queda en pie la estructura del viejo hotel que alojó a muchos usuarios. En cualquier caso, las aguas siguen brotando de una galería que se encuentra en el paraje de El Rincón.
"Desde principios de la década de 1930 hasta la de 1970 han sido muchos y diversos los tratamientos médicos practicados con esas aguas minero medicinales. Actualmente permanece la galería por donde brota el agua, mientras el hotel, de arquitectura neoclásica, conserva su estructura, pese a estar cerrado al público y después de haber sido una vivienda particular", destaca el director del Instituto de Hidrología de la Universidad Fernando Pessoa de Guía, que fue responsable de estos departamentos en las dos universidades canarias hasta su jubilación.
Eduardo Navarro asistió a Termatalia con su colaborador Luis Sarbelio Fernández Jiménez. Ambos trabajan también con las aguas de los balneario Charco Verde (Llanos de Aridane) y La Fuente Santa (Fuencaliente), ambos en la isla de La Palma.
La feria Termatalia se presenta como un puente termal entre Euroasia y América, y un centro de negocios y conocimientos, que reunió en la ciudad gallega de Orense a finales de septiembre a profesionales de más de 25 países.
Es la principal feria especializada en turismo termal
"Termatalia es la única feria internacional especializada en turismo termal de salud y bienestar que conecta América y Euroasia. Su foco principal es la puesta en valor de los recursos naturales como el agua. La participación de oferta especializada y potenciales compradores genera nuevas oportunidades de negocio, abriendo nuevos canales de comercialización y transferencia de know how", señala la organización.
El profesor presentó también en Termatalia varios póster de gran tamaño sobre sus investigaciones en las salinas de Bocacanegro, en el municipio grancanario de Agüimes; al igual que sobre las analíticas de las aguas del citado balneario de El Rincón; y sobre El Charco Verde, de Los Llanos de Aridane.
