Cambios de la DGT: La nueva señal de STOP que entra en vigor en el 2023

El próximo año Tráfico introducirá nuevas señales y modificará algunas de las ya existentes

La señal de STOP seguirá evolucionando

La señal de STOP seguirá evolucionando

R. Franco

La Dirección General de Tráfico (DGT) avanza con los nuevos tiempos. Y las señales que rigen la circulación por las vías españolas también deben amoldarse a las novedades que se van introduciendo en el parque móvil de nuestro país, como por ejemplo los llamados Vehículos de Movilidad Personal (VMP), entre los que destacan los patinetes eléctricos, un medio de locomoción que está empezando a regularizarse debido a la necesidad de una normativa que contemple a un elemento cada vez más habitual en las calles de nuestras ciudades.

La DGT va a introducir algunas señales nuevas en el 2023, además de actualizar o modificar algunas de las ya existentes. En este último caso no se salva la más popular de todas, tanto por su importancia en la circulación, ya que hacerle caso es indispensable para salvar vidas, como por su imagen icónica en todo el planeta.

Hablamos de la señal de STOP, que va a variar de la que hemos conocido en los últimos 18 años. Que nadie se espere ninguna revolución, ya que la variación que sufrirá la señal vertical que nos obliga a detener el vehículo va a ser mínima. A grandes rasgos solo cambiará la tipografía, ya que el fondo de color rojo y de forma hexagonal se mantendrá invariable. Sin embargo, las letras S, T, O y P van a aumentar de tamaño con la intención de hacerlas todavía más visibles para los conductores a más larga distancia.

A la izquierda la nueva señal de STOP que sustituirá a la vigente en los últimos 18 años (derecha)

A la izquierda la nueva señal de STOP que sustituirá a la vigente en los últimos 18 años (derecha)

La misma sanción

La señal de STOP variará, pero no así la multa que conlleva no respetarla debidamente, que se mantiene en 200 euros y cuatro puntos menos en tu carnet de conducir, un castigo mínimo comparado con la tragedia que puede conllevar hacer caso omiso de esta señalización, una infracción que provoca más de un millar de accidentes al año.