Una neurocientífica de Harvard desvela la habilidad que comparten todas las personas con éxito

La neurocientífica Juliette Han muestra cómo actuar para llegar a lo más alto y considera que la timidez no es un hándicap, sino todo lo contrario

Para tener éxito en la vida no es necesario ser extrovertido, más bien podría jugar en tu contra según una neurocientífica de Harvard.

Para tener éxito en la vida no es necesario ser extrovertido, más bien podría jugar en tu contra según una neurocientífica de Harvard.

F. Aznar

Si eres introvertido estás de enhorabuena. Tradicionalmente la timidez no era una de las características de la personalidad más admiradas, pero gracias a la neurocientífica de la Universidad de Harvard Juliette Han la situación ha dado un giro de 180 grados, pues en un artículo publicado por la CNBC considera que esta habilidad subestimada debe ser puesta en valor.

“Siempre he sido introvertida. Cuando conseguí mi primer trabajo después de obtener mi doctorado en neurociencia, me preocupaba que tendría dificultades para comunicarme con los demás”, comienza relatando Han en un artículo que ha dado la vuelta al mundo ante la trascendencia de sus palabras. “Rápidamente aprendí que no necesitaba obligarme a ser extrovertida. La habilidad más subestimada que tienen las personas exitosas, especialmente las introvertidas, es la capacidad de escribir con claridad”, añade Juliette Han.

Considera la neurocientífica que independientemente del sector laboral en el que se desarrolle la carrera profesional de una persona, “si escribe bien tendrá más confianza en sus interacciones: en correos electrónicos, hablar en público o incluso en charlas triviales”.

Cómo escribir bien

Han se atreve a lanzar una serie de recomendaciones que trasladamos a continuación para que cualquiera pueda mejorar su escritura, ganando así la confianza necesaria para desarrollarse en su vida personal y laboral. Son las siguientes:

  • Elija el formato adecuado para su mensaje. Antes de comunicar una idea o solicitud, decida el mejor formato para entregar su información. Por ejemplo, si está compartiendo una investigación que involucra datos complejos, entonces un PowerPoint que muestre gráficos e imágenes puede ser el mejor formato. Para discusiones como actualizaciones de progreso o recopilación de comentarios, generalmente es suficiente un breve correo electrónico o una visita en persona.
  • Utiliza un lenguaje sencillo. Utilizar una jerga especializada no siempre es buena opción. La simplicidad en ocasiones es una virtud. Considere usar gráficos o analogías para acompañar sus palabras.
  • Piense en el receptor. Por regla general la gente a la que enviamos correos o mensajes reciben cientos de ellos a diario, es por ello que hay que intentar reducir el esfuerzo que tenga que hacer a la hora de recibir los nuestros.
  • Pida opinión. El lector debe saber qué decimos y por qué lo decimos para generar confianza. Por nuestra parte no podemos obviar los comentarios e inquietudes que nos trasladen.
  • Escribir con precisión. Hay que evitar en la medida de lo posible los errores ortográficos, gramaticales o tipográficos. Cuidando la forma es más fácil llegar al fondo. Las bromas y el humor en ocasiones pueden distraer del mensaje.