La 'viuda negra', a punto de dar a luz en la cárcel
Maje, condenada a 22 años de prisión por el asesinato de su marido, está ingresada en la Unidad de Madres de Fontcalent
María Jesús Moreno Cantó Maje, la conocida viuda negra del Crimen de Patraix condenada a 22 años de prisión por planear y cometer el asesinato de su marido en València, se encuentra a días de dar a luz a su primer hijo a sus 33 años.
La semana pasada fue trasladada desde la prisión valenciana de Picassent hasta la cárcel alicantina de Fontcalent, que lleva el nombre de 'Irene Villa', la cuarta unidad de este tipo abierta en la red carcelaria de España y que comenzó la actividad en octubre de 2020.
Maje, nacida en Novelda, será madre primeriza en la prisión alicantina a principios de junio y permanecerá en esta unidad de maternidad hasta que su hijo cumpla tres años, tal y como establece la legislación penitenciaria. Después, el menor debería de abandonar el centro penitenciario y criarse con los familiares más cercanos o con su padre si saliese antes de prisión.
Maje habría estado manteniendo relaciones sexuales furtivas con al menos cuatro reclusos, con quienes se habría citado enviándoles cartas similares a las que se cruzaba con Salva cuando eran amantes.
Hay que recordar que Maje y Salva cumplen 22 y 17 años respectivamente por el asesinato a cuchilladas del ingeniero, Antonio Navarro, en un garaje de la calle Calamocha de València el 16 de agosto de 2017 cuando él se disponía a ir a trabajar. Meses después, el 18 de enero, la policía encontró el arma del crimen: un cuchillo de 14 centímetros de hoja oculto dentro de la fosa séptica del chalé propiedad de Salva en Riba-roja.
¿Quién es el padre de su hijo?
David M. R., de menos de 40 años, es el padre del hijo que espera Maje y lleva entre rejas desde junio de 2008. Tal y como adelantó este periódico, cumple condena por asestar 44 cuchilladas a su víctima, un hombre de 27 años, y lanzar su cuerpo en el fondo del Xúquer con una bombona de butano atada a los pies.
¿Dónde crecerá su hijo?
La Unidad de Madres de Fontcalent es un recinto de 3.000 metros cuadrados con 32 habitaciones que incluye, además del área residencial, una zona de estancia con dos salas de estar y juegos para madres e hijos, aseos infantiles, talleres para niños y un espacio reservado a la consulta médica y farmacia.
Este tipo de prisiones deben procurar el bienestar de los menores, alejados del entorno penitenciario, así como favorecer la reinserción de las madres privadas de libertad. Precisamente, el módulo de Alicante cuenta con camas nido, cunas y un pequeño salón de estar con microondas y fregadero. Dos de esas habitaciones son dobles, pensadas para que mujeres embarazadas puedan convivir con madres y una está adaptada a personas con movilidad reducida.
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