El gran susto por el desalojo de Ikea: "La gente salió en estampida"

Un fallo técnico desató el pánico y algunos aprovecharon para llevarse la compra sin pagar en el establecimiento de la multinacional del mueble ubicado en Asturias: "Hubo quien salió corriendo con carros"

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LNE

Sara Bernardo

Susto y revuelo entre quienes esta tarde decidieron pasarse por el centro de Ikea en Siero (Asturias). Una falsa alarma hizo que saltase por megafonía el aviso de desalojo: "Hay que abandonar el edificio y alejarse de él", advirtieron los responsables de la gran tienda de la compañía sueca. Una estampida de clientes abandonó entonces el equipamiento de manera apresurada. "No había ningún tipo de control", comentaron testigos de lo sucedido: "La gente salía corriendo en estampida".

Desde la empresa sueca comentan que, por el momento, están investigando el motivo de la alarma, aunque sí aclaran que se trata de un fallo técnico. "El procedimiento habitual en caso de evacuación es activar un 'código mil', que se trata de un aviso interno para que los trabajadores sean los primeros en saber lo que está ocurriendo. Una vez son avisados, se bloquean las cajas y se controlan las salidas para poder hacer un desalojo más ordenado", explican fuentes de la compañía. Pero esa alerta previa no sonó, lo que supuso "un caos", según relatan quienes se encontraban dentro. "Algunos salían hasta con los carros. Hoy aquí se perdió dinero", comentaban algunos de los presentes.

Tras media hora de incertidumbre y una muchedumbre de curiosos a las puertas de la tienda, el personal autorizó la reapertura. "Salieron y dijeron que no pasaba nada, que había sido un error", explicó un cliente. De esta forma, los usuarios pudieron continuar con sus compras, no sin antes recoger a los niños que habían sido sacados de la guardería del comercio hasta el aparcamiento.

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