Según fuentes de la policía de Málaga, el fuego en los calabozos de la comisaría fue originado intencionadamente por uno de los inmigrantes. Al parecer, fue un miembro de una red que se dedicada a la introducción de ciudadanos extranjeros en España, quien impidió salir a los demás de la celda --cuando fue abierta ante el fuego-- con la pretensión de aprovechar la confusión e intentar la fuga después.