Un avión F-5 de la Base Aérea de Talavera la Real (Badajoz) se estrelló ayer y causó la muerte de su piloto y único ocupante -que formaba parte del equipo que preparaba los ejercicios acrobáticos que se celebrarán con motivo del 50 Aniversario del Ala 23-, en lo que es el segundo accidente mortal de un aparato de esta base en poco más de tres meses.

El piloto fallecido, el capitán instructor Manuel Rivera Hernández, realizaba maniobras de acrobacia cuando, por causas que se desconocen, el avión se precipitó contra el suelo, según explicó al comandante del Ala 23, José Antonio Montoya, que se desplazó al lugar.

Natural de Guardamar (Alicante), de 34 años, casado y con dos hijos, el piloto fallecido llevaba diez años en el Ala 23 de esta base aérea y contaba con una experiencia de más de 3.000 horas de vuelo, informaron fuentes de la base militar.

El comandante señaló que todo el personal de la base se encuentra muy abatido por el suceso, ya que esta es la segunda pérdida de un compañero en un accidente de este tipo en menos de tres meses.

Además, destacó que se ha producido en un momento en el que todos estaban muy ilusionados con la organización de los actos conmemorativos del 50 aniversario del Ala 23, que comenzarán el 5 de mayo y que incluyen la visita, el martes 6, del rey Juan Carlos.

El funeral tendrá lugar hoy, a las 11.00 horas, en la Base Aérea de Talavera la Real.