Mediante el mencionado sistema a tres, el acusado colombiano, por sí mismo o a través de sus plurales y necesarios colaboradores en la calle, cobraba las llamadas a los comunicantes que estaban en la calle por un importe inferior a la tarifa que habría costado utilizando los servicios de Telefónica España S. A. Las personas con las que colaboraba éste le entregaban lo recaudado o lo ingresaban en la cuenta corriente que tenía abierta en una sucursal de La Caixa en Madrid.