La detención de estos individuos es un ejemplo que evidencia que la procedencia de gran cantidad de la droga que se mueve por Castellón es abastecida por ciudadanos suramericanos, en este caso guatemalteco y colombianos, como publicó este periódico. Desplazándose ocasionalmente a la provincia o asentándose en localidades, como es el caso de cuatro de los detenidos, venden por gramos la cocaína comprada por kilos, obteniendo lucrativos beneficios.