La Policía Nacional ha desarticulado en Madrid un grupo criminal que "tocaba todos los palos", tráfico de drogas, estafas y falsificaciones, en una operación en la que ha detenido a cinco personas, entre ellas el presunto jefe de la mafia cubana en Miami (Estados Unidos), David M., de 38 años de edad.

Los agentes han intervenido tres kilos de cocaína, una pistola con munición blindada, más de 30.000 euros, joyas y valiosos relojes, documentación falsa, entre otros efectos, informa la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Los detenidos, tres hombres y dos mujeres, están acusados de delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, falsificación y estafas.

ANTECEDENTES Se trata de los cubanos Edgar M.S., de 28 años; Mario P.D., de 38; Yuliet A.G., de 27, y David M., de 38, y la colombiana Martha Yulieth E.O., de 28, todos los cuales se encuentran ya en prisión. Edgar M.S. posee siete antecedentes policiales con cinco identidades distintas.

Por otra parte, en las habitaciones que los detenidos ocupaban en un hotel madrileño se incautaron 32.000 euros, joyas y relojes de gran valor y 15 teléfonos móviles. Además, gran cantidad de documentos falsos, pasaportes de Estados Unidos y Cuba, certificados de nacimiento y penales con las fotografías de los detenidos, permisos de conducir, tarjetas de crédito, un pequeñísimo lector copiador de bandas magnéticas (que incluso cabe en la palma de la mano) y otros documentos. También se intervinieron dos vehículos.

La policía tuvo conocimiento de que en un hotel de Madrid estaba actuando un grupo criminal dedicado fundamentalmente a la falsificación de documentos oficiales, públicos y tarjetas de crédito, cuyos datos eran copiados por sofisticados procedimientos electrónicos.

BAJO VIGILANCIA Los agentes descubrieron que los sospechosos, además de los delitos anteriormente citados, también eran traficantes de drogas.

Sometidos a una estrecha vigilancia, fueron arrestados a finales de la semana pasada.

Los cinco detenidos están acusados de más de 30 delitos de falsificación y estafa, además de otros contra la salud pública y por tenencia ilícita de armas.

En el momento del arresto les fueron intervenidos más de tres kilos de cocaína de gran pureza y una pistola de última generación, marca CZ 110, calibre 9 parabéllum, con el cargador repleto de munición blindada.

Los agentes del Cuerpo Superior de Policía investigan en estos momentos la documentación intervenida y la procedencia de las joyas y relojes incautados. También se está a la espera del peritaje de la Policía Científica por si el arma intervenida estuviera implicada en algún delito contra las personas.