Los cuatro montañeros atrapados desde la noche del pasado sábado en el barranco del Infierno, situado en la localidad alicantina de la Vall de Laguar, lograron se encuentran ya a salvo tras haber pasado más de 36 horas a la intemperie bajo la lluvia.

Uno a uno, las dos chicas y los dos chicos que componían el grupo de excursionistas, entre ellos un bombero municipal de Alicante, consiguieron salvar una pared vertical de unos 200 metros de altura y recorrer a pie los kilómetros que les separaban de la base establecida por los efectivos de rescate.

Según las fuentes citadas, únicamente presentan cortes, ampollas y problemas relacionados con el frío en los pies y se encuentran exhaustos, por lo que fueron atendidos en el lugar por el personal del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) y trasladados posteriormente hasta el centro de salud de la localidad de Pego para un reconocimiento más exhaustivo.

Los excursionistas se vieron sorprendidos durante la tarde noche del sábado en esta zona de abrupta orografía por la lluvia torrencial, y quedaron atrapados por el caudal que llevaban los numerosos barrancos y pozas que salpican este paraje.