Tras no acudir a clase ni el pasado viernes ni el lunes, Sara, la menor marroquí supuestamente agredida por un grupo de compañeros volvió ayer al instituto con total "normalidad", explicó ayer ella misma. Fue en autobús, "sin miedo" a ver a sus supuestos agresores. "Nadie me ha dicho nada ni me ha molestado", añadió.