La policía ha detenido a diez personas, de distintas nacionalidades, en la desarticulación de una organización de tráfico de droga, tras interceptar en el aeródromo de Segovia un reactor procedente de África con 106 kilos de cocaína, cuya venta iba destinada a Madrid y otros países europeos, según informaron fuentes policiales.

La droga, valorada en el mercado negro en unos 11 millones de euros, fue incautados en el interior de un reactor en el aeródromo de Fuentemilanos (Segovia). Las detenciones se han producido dentro de la operación Fomento, desarrollada en Segovia y en Madrid por agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco).

La cocaína era trasladada desde África en un jet con dos motores a reacción, valorado en unos tres millones de euros, en tres cajas de cartón con el símbolo de Cruz Roja, en cuyo interior se distribuían paquetes de un kilo con la marca coca cola, que determina el laboratorio colombiano de donde procede. Asimismo, se encontró un vehículo autocaravana, ocupado por un supuesto matrimonio, también detenido, donde iba a ser transportada la droga y que pretendía pasar desapercibida en un cámping que hay en el aeródromo, ubicado a 19 kilómetros de Segovia.

MATRÍCULA ALEMANA El hecho de que tanto la matrícula del avión como la de la autocaravana sean alemanas ha sido interpretado como una intención de los detenidos de pasar desapercibidos, ya que el aeródromo segoviano es utilizado por numerosos ciudadanos alemanes, que practican el vuelo sin motor.

El comisario jefe de la Udyco, Miguel García, puso de manifiesto que se trata de una confirmación más de que los grandes carteles colombianos están empleado la ruta de África, desde Senegal y Guinea, para introducir la droga en Europa.