El empresario portugués detenido el pasado martes en la localidad de Oropesa por captación ilegal de trabajadores pasará hoy a disposición judicial, según informaron fuentes del Cuerpo Nacional de Policía. El arresto del empresario se produjo tras una operación policial efectuada en una empresa en este municipio costero, donde se desarticuló una red de inmigración irregular con la detención de 60 personas y la identificación de otras 300, por infringir la ley de extranjería.

El detenido, gerente de una subcontrata, permanece actualmente en los calabozos de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Castellón, acusado de un supuesto delito contra el derecho de los trabajadores para los que se ha dictado una orden de expulsión a sus respectivos países de origen.

Según explicaron las citadas fuentes, el empresario portugués operaba en siete edificios en construcción en la población de Oropesa. Trasladaba a los trabajadores de forma ilegal, incumplía los requisitos establecidos por la ley en vigor; carecía de autorizaciones y no daba de alta laboral en la Seguridad Social a ninguno de sus empleados.