Un vecino de Castellón, de iniciales J. G. A., se enfrenta a 10 años de cárcel después de que, presuntamente, intentara atropellar a su vecina y al hijo de esta, de 6 años, con los que mantenía una relación de enemistad, cuando ambos se encontraban en una parada de autobús del camino Serradal de la capital.

Los hechos ocurrieron el 20 de junio del 2001, cuando, según la denunciante, su vecino le profirió insultos como "puta" y le dijo frases como "te voy a matar, te voy a dejar en paz debajo de mi coche", cuando acompañaba a su hijo a coger el autobús, según expuso ayer en el juicio celebrado en la Sección Primera de la Audiencia Provincial.

La mujer aseguró que su vecino, tras insultarla, "aceleró con su coche y yo empecé a correr con mi hijo de la mano. Si no me mató fue porque me caí detrás de una caseta de contadores y el parachoques del coche chocó contra la misma", dijo.

Por su parte, el acusado aseguró ser inocente y dijo que la mujer "tiró piedras contra el coche" cuando le vio y él realizó "una maniobra brusca en la calzada para no colisionar con otros vehículos". "Luego bajé, creo que le pegué una torta y ella cayó al suelo", dijo.