La esposa del mosso d´esquadra de Lli§ de Vall (Barcelona) acusado del doble asesinato de su mujer y su suegra tenía sospechas de que su marido le era infiel, lo que había causado algunos problemas en el matrimonio, según aseguraron ayer familiares y amigos de las víctimas.

La familia, allegados y vecinos de las mujeres asesinadas declararon en la Audiencia de Barcelona en la segunda jornada del juicio contra el agente, Josep Lluís R., de 36 años, para quien la fiscalía y la acusación particular piden una condena de 50 años de prisión mientras su defensa insiste en su inocencia.

El padre, la hermana, la cuñada y la mejor amiga de Silvia C., la esposa del procesado, coincidieron en relatar que la fallecida les había expresado sus "dudas" acerca de la fidelidad de su marido, al que había encontrado un preservativo y unos pendientes en la guantera del coche, así como arañazos en la espalda. Precisamente, justo el día antes del crimen, en una comida familiar, la esposa del mosso, que se encontraba "triste y llorosa", comentó a su cuñada que su matrimonio estaba pasando "una mala época", la cual se percató de que había cierta tensión entre esta y su marido. Silvia también comentó a su amiga que había discutido con su marido.