La provincia de Castellón se ha convertido en una de las zonas más afectadas por los grupos de delincuencia organizada dedicados al asalto de viviendas, que centran su campo de actuación en el corredor mediterráneo.

De hecho, en siete meses, al menos cuatro bandas diferentes han actuado en la provincia. Tres de ellas han sido desarticuladas, pero ahora un nuevo grupo ha vuelto a a atemorizar a los vecinos de La Plana.

En marzo la policía detuvo a 52 ciudadanos rumanos a los que se les imputaban robos con fuerza cometidos en numerosos domicilios, entre otros delitos.

La Guardia Civil desarticuló en junio una red de colombianos en Castellón, Benicarló, Valencia y Madrid, a la que se imputa el asalto a un chalet de Canals y un robo en una casa de la partida Madrigal de Vila-real, donde ataron a los dueños y les amenazaron con machetes.

Poco después detuvieron a los integrantes de una banda que asaltó una casa de Nules en la que apalearon a una familia, y practicó un secuestro exprés en la Vall.