El buque chatarrero "New Flame", que colisionó hace dos semanas con un petrolero

y que está encallado frente a la costa de Algeciras, corre riesgo de romperse

por la mitad a causa del efecto de la marea y de las olas, según informó hoy el

Gobierno de Gibraltar.

Un equipo de salvamento marítimo evacuó ayer por la tarde a todo el personal

que se encontraba trabajando en la extracción del combustible del barco, que

transportaba alrededor de 27.000 toneladas de chatarra, a causa del riesgo que

suponía la posible fractura del barco.

El Gobierno del Peñón afirmó hoy que existe un riesgo real de que el barco se

parta en dos, aunque matizó que cuenta con todas las medidas para hacer frente a

esta posibilidad.

Además, la empresa Wijsmuller, encargada del rescate del chatarrero, aseguró

que, en caso de fractura del buque, no se producirá ningún vertido.