El adolescente de 14 años detenido el miércoles por su presunta implicación en la muerte de su madre, que recibió un disparo, declaró ayer ante la Fiscalía de Menores, aunque no será previsiblemente hasta hoy cuando el informe fiscal se eleve al juzgado para que éste adopte una decisión. Al parecer, el adolescente confesó los hechos, que atribuyó a un accidente,

Según explicaron fuentes judiciales, el fiscal instructor ya ha tomado declaración al adolescente, quien también ha de entrevistarse con el equipo técnico de apoyo. Al igual que el fiscal, el equipo técnico de apoyo también informará de las mejores medidas a adoptar al Juzgado de Menores 2 de Granada, que es el que deberá decidir sobre la situación en que quede el menor una vez cuente con ambos informes.

BAJO CUSTODIA El menor, que pasó la noche en dependencias de la Guardia Civil, quedó ayer mientras tanto bajo custodia fiscal. El adolescente declaró el miércoles ante la Guardia Civil, inicialmente como testigo, después de que relatara que halló a su madre muerta cuando, al oír un disparo, regresó a la casa pocos minutos después de haberse marchado para ir al instituto.

Tras el hallazgo, el menor fue a buscar a su padre, que estaba en la carpintería donde trabaja.

Durante su declaración ante la Guardia Civil, y tras incurrir en varias contradicciones, el menor confesó los hechos, pero los atribuyó a un accidente, confirmaron fuentes de la investigación. Serán los servicios de criminalística de la Guardia Civil quienes den o no credibilidad a esa versión, tras el análisis de factores, como la distancia desde la que se produjo el disparo o la cantidad de pólvora hallada en el cadáver, según las fuentes.

El Ayuntamiento de Cortes de Baza decretó tres días de luto oficial tras los hechos, que han conmocionado a los vecinos de este pequeño pueblo de Granada de unos mil habitantes, dijo Práxedes Torrecillas, teniente alcalde.

El padre del menor, que tiene intención de ver a su hijo hoy, está en una situación anímica "terrible" y "destrozado", al igual que el resto de la familia, explicó Torrecillas. El adolescente era algo "rebelde" en el ámbito familiar y había tenido, al parecer, algunos problemas en el instituto, aunque su actitud parecía ser la habitual de un chico de su edad, según Torrecillas.