Los detenidos por la muerte de la niña onubense Mari Luz Cortés han llegado a las 17:05 a la Audiencia Provincial de Huelva desde de la comisaría de Cuenca, donde estaban recluidos desde la noche del pasado martes, y han sido recibidos por 300 personas que los han increpado con gritos de "asesino".

A su llegada a los juzgados onubenses las Fuerzas del Orden se han tenido que emplear a fondo para impedir que los vecinos de la familia de la niña llegasen a la altura del presunto autor de la muerte de la niña, y sólo una vez que ha entrado en el edificio han podido romper el cordón policial, tirando las vallas dispuestas para impedir el paso y llegar a la acera de la Audiencia, uno de los primeros el abuelo de Mari Luz, Juan Cortés.

Los vecinos han llegado a lanzar palos y tomates contra el principal sospechoso, Santiago del Valle, y su hermana, que salieron en dos vehículos de la comisaría de Cuenca sobre las 08:45 horas, y han sido llevados al Juzgado de Instrucción número 1 de Huelva que instruye el caso de la desaparición y muerte de Mari Luz.

Como consecuencia de estos lanzamientos han resultado heridos una redactora de Onda Cero, que ha recibido un golpe en el labio inferior precisando asistencia médica en el mismo lugar, y el cámara de una productora de la cadena Cuatro, al que le ha impactado una piedra en la cabeza y ha sido trasladado en ambulancia a un centro sanitario cercano. Al margen de estas personas y pese a los momentos de tensión vividos a las puertas de los juzgados, no se han producido más heridos ni ha sido necesaria la carga policial.

La Alameda Sundheim, avenida en la que se encuentra la Audiencia de Huelva, quedaba controlada por la Policía Nacional y la Policía Local en torno a las 15:30 horas cuando procedieron a situar a todos los presentes en el lugar, ciudadanos y medios de comunicación, en la acera de enfrente de la Audiencia en la que una hora después se colocarían vallas para contener a la gente.

Hasta Huelva se ha desplazado una unidad de antidisturbios de la Policía Nacional procedente de Sevilla, que una hora después de la llegada de los detenidos aún permanecen en la zona evitando que se produzcan nuevos incidentes.

Los detenidos, imputados por un presunto delito de "homicidio involuntario" tras su paso a disposición judicial prestarán ahora declaración ante la titular del Juzgado de Instrucción número 1 que deberá determinar tras escucharlos su ingreso en prisión o no. Una tercera imputada, Isabel García, esposa del principal sospechoso, quedó ayer en libertad con cargos.