La Policia Local de Castellón intervino en el dia de ayer, en diversos bazares de la ciudad, un total 450 películas de contenido pornográfico y diversos artículos de sexop. Los responsables de estos bazares orientales están incumpliendo la normativa de venta de películas pornográficas, no porque no puedan venderlas, que sí pueden si obtienen las correspondientes licencias. Las normas que protegen a los menores exigen que este tipo de mercancías se exhiban para su venta en lugares a los que no tengan acceso los niños. Los locales de alquiler de películas, por ejemplo, disponen en un rincón una sala apartada, a la que se accede por una cortinilla, donde se muestran estos títulos destinados exclusivamente a un público adulto.