Los magistrados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón han absuelto a un padre, Rafael C.E., de un delito de lesiones contra su hijo, menor de edad, a quien propinó una bofetada tras mantener una acalorada discusión en casa con su esposa y madre del joven.

Los hechos sucedieron el día 21 de mayo, cuando el ahora exculpado --quien ya había sido condenado por violencia de género, doméstica, maltrato familiar y a quien impusieron una orden de alejamiento que ya había cesado-- comenzó a pelearse con su mujer, en el domicilio familiar, que está ubicado en la calle Enrique Marco, número 2.

Durante la discusión, la esposa sufrió excoriaciones en ambos antebrazos, hematoma en la cara interna del brazo y en el muslo, así como varias contusiones en las piernas. Por su parte, Rafael C.E. también resultó lesionado con una herida incisa de dos centímetros en la cara posterior del hombro, daños punzantes y erosiones en las extremidades.

Como consecuencia de esta desavenencia, el menor, según la sentencia, intervino e insistió en intentar echar a su padre de casa por la fuerza, diciéndole en repetidas ocasiones que se marchara y estirándole de la mano.

"UN GOLPE INOCUO" Pero el propio menor ya reconoció en su día ante la policía que desatendió las advertencias de su progenitor para que se callara y cesara en sus pretensiones. Para el tribunal la bofetada fue "inocua", ya que una testigo de los hechos declaró que el propio joven le dijo que no le había hecho daño, pero el forense sí determinó que presentaba una "hiperemia en la mejilla". Para los magistrados, se trata de un acto "aislado y puntual", que "no reviste relevancia penal" y tienen en cuenta el concepto de "adecuación social" por lo que concluyen que la lesión "no merece reproche punitivo alguno por las circunstancias en que se produjo, ya que la actuación del acusado no fue irracional ni desproporcionada".