El cuerpo sin vida de Laura Alonso, de 19 años, vecina del municipio ourensano de Toén, que desapareció en la madrugada del pasado domingo, fue hallado ayer por un por un grupo de cinco voluntarios que dirigía un agente de la Guardia Civil que formaba parte de una patrulla que rastreaba la zona en la que se había encontrado la chaqueta de la joven, según informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno. Por su parte, el teniente de la Guardia Civil, Javier Martín reveló que el cadáver de la joven Laura Alonso fue hallado por el olor que desprendía su cuerpo. Asimismo, aclaró que la zona en la que fue encontrado el cuerpo ya había sido rastreada otros días, pero no se había descubierto porque estaba entre la maleza. El lugar del hallazgo está situado en el monte del municipio ourensano de Toén, a unos tres kilómetros de la zona en la que había sido encontrado el coche de la víctima y entre cinco y seis kilómetros del sitio en el que fue recuperada su chaqueta. Tras el descubrimiento del cuerpo sin vida de la joven y su identificación se procedió a establecer un círculo de seguridad para impedir que se puedan borrar pistas importantes para esclarecer este suceso, indicaron las mismas fuentes.

Se da la circunstancia de que en el momento del hallazgo participaban en los trabajos de búsqueda el padre y el abuelo de Laura, aunque en otras zonas, según explicó el teniente Martin.

El teniente Martín dijo que las Fuerzas de Seguridad del Estado trabajarán "duramente en la investigación que propicie determinar las causas que desencadenaron este suceso. Esperamos tener suerte y que pueda ser encontrado el asesino", afirmó.

Las autoridades analizaron ayer la zona para recoger todas la pruebas posibles.