SEVILLA. El hombre que fue detenido el pasado domingo por arrancar un brazo a la imagen de Jesús del Gran Poder de Sevilla declaró ayer a la jueza de guardia que lo hizo porque él representa “el espíritu de Jesús”, tras lo cual fue ingresado en la Unidad de Agudos de Psiquiatría de un hospital. El presunto agresor, Luis C.O., funcionario de prisiones de 37 años, fue imputado de un presunto delito de daños al patrimonio, con una pena máxima de 3 años de cárcel. EFE