El alojamiento rural la Rambleta de Olocau del Rey, en Els Ports, hará frente a un desembolso cercano a los 6.000 euros tras el asalto sufrido en la noche del martes. Los delincuentes aprovecharon que no había huéspedes en esa jornada para desvalijar el hotel, intentar robar el vehículo de la casa y, sin miedo a ser vistos, se quedaron a dormir en las habitaciones de los clientes.

Según informó ayer el propietario, José Luis Falomir, los asaltantes accedieron a la casa en coche a través de una finca privada de 4 kilómetros de extensión. Dado que el hotel no contaba con reservas esa noche y el encargado de la masía estaba fuera, los delincuentes cumplieron su objetivo sin muchas dificultades. "Siempre hay gente, pero por casualidad ese día, no", añadió.

Atravesaron el coto privado, forzaron tres puertas y llegaron hasta el interior del hotel. Allí "registraron todas las dependencias", según Falomir, y robaron un televisor y un karaoke. Tras recoger los aparatos electrónicos de más valor "se echaron a descansar en dos camas", que aparecieron deshechas al día siguiente.

No contentos con el botín, los individuos salieron del inmueble, rompieron el cristal de un Nissan propiedad de la casa e intentaron hacerle el puente. Sin embargo, la operación les salió mal y, según supone el afectado, se dirigieron en su propio vehículo a una nave ubicada a 500 metros que también forma parte del complejo turístico. La puerta de entrada también apareció forzada con una pata de cabra, pero no se llevaron botín del interior, donde se almacenan pertenencias de los propietarios.

Según indican las mismas fuentes, el encargado de la finca vio, días atrás, un coche a un kilómetro de distancia que, al percatarse de que la masía estaba habitada, "dio la vuelta y se marchó". Falomir sospecha que los asaltantes han estado siguiendo la actividad de la finca para comprobar la rutina diaria y actuar sin ser descubiertos. Es la primera vez que la Rambleta sufre un ataque de estas características. El último intento de robo en una finca de la zona se produjo hace dos años y desde entonces la tranquilidad ha sido la tónica dominante.

DENUNCIA // José Luis Falomir acudió a las dependencias de la Guardia Civil para presentar la denuncia por los hechos ocurridos en su propiedad. Los agentes se desplazaron ayer hasta la masía para recoger pruebas del suceso e iniciar la investigación para dar con los autores del delito.

De momento no se ha producido ninguna detención. La dificultad del caso estriba en que los asaltantes actuaron sin ser vistos, pero no tomaron demasiadas precauciones en un asalto que se extendió durante horas. Los propietarios confían en que dejaran huellas en las instalaciones para que puedan ser identificados y arrestados en breve. H