La sección segunda de la Audiencia Provincial juzgó ayer a I.A., acusado de un delito intentado de agresión sexual, un delito de robo con violencia y otro de hurto. El fiscal pide para él 8 años y 2 meses de prisión. La víctima, R.B., denunció el intento de violación un mes después de los hechos.

Según defendió ayer lunes la víctima en el juicio, el individuo, que era su pareja hasta un día antes de los hechos, fue hasta la casa donde se trasladó ella tras romper la relación para robarle varias joyas y, además, intentar agredirla sexualmente.

Tras el suceso, ella acudió al cuartel de la Guardia Civil para denunciar la sustracción de pendientes, gargantillas y anillos de oro, pero no informó a los agentes de la Benemérita del intento de violación. No obstante, se desplazó hasta un centro médico para que los sanitarios rellenasen el parte de lesiones que, presuntamente, le provocó el acusado durante el forcejeo.

Según el acusado, él acudió a la casa, donde también estaba en ese momento una prima de la víctima, para recuperar las joyas, que eran de su madre. Después se puso en contacto con la casera del piso que habían compartido para devolverle las llaves y recogió sus enseres. El procesado aseguró que ella se había autolesionado. “Soy joven. Me puedo buscar otra chica. Ni pensé violarla”, dijo. H