Una mujer brasileña se sentó ayer en el banquillo de los acusados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón acusada de un delito de falsedad de documento oficial, ya que, presuntamente, habría falsificado el certificado de defunción de su marido para cobrar un seguro de vida de más de 90.000 euros.

El juicio se suspendió debido a que el médico que firmó dicho certificado no acudió al mismo, según explicaron fuentes judiciales.

La propia acusada explicó a Mediterráneo que se trata de una confusión, ya que su marido falleció en Brasil en el año 2001.

Para la Fiscalía de Castellón esta mujer miente. Así, solicitan para ella dos años y seis meses de cárcel y una multa de 1.000 euros.

Según el fiscal, los hechos sucedieron en el año 2001, cuando la mujer brasileña, que ya estuvo condenada por un caso de estafa e el año 2006, puso en conocimiento de la aseguradora el fallecimiento de su marido, Fernando, y presentó una declaración de defunción en Brasil, donde este, supuestamente, había muerto.

Para el fiscal la firma que aparece en el certificado de defunción del marido es falsa y no se ha llegado a acreditar dicha muerte.

La acusación particular, ostentada por el letrado Ignacio Badenes, solicita cuatro años de cárcel y pide, además, la exhumación del cadáver del marido en Brasil. H