Un hombre ha sido condenado a una multa de 1.800 euros y a la prohibición de no conducir durante un año, ya que fue sorprendido por la avenida de la Barca, cruce con avenida Benicàssim de Castellón, bajo los efectos del alcohol y sin llevar las luces del turismo encendidas. El conductor, al ser interceptado, dio respuestas incoherentes a los agentes y deambulaba vacilante. H