Nuevos fardos de hachís han aparecido en las últimas horas en las playas de Benicàssim y en Moncofa, según confirmaron a Mediterráneo fuentes fidedignas, quienes concretaron que otros tantos más han sido recuperados también en aguas de Valencia y en la costa de Gandía. Un goteo que perdura ya una semana, desde que el pasado domingo un navegante localizara en su catamarán el primer paquete.

Al parecer, como especificaron estas fuentes, los narcotraficantes habrían arrojado los bultos de estupefacientes en aguas internacionales, a unas 15 millas de distancia de la costa, donde, posiblemente, se ha podido llevar a cabo un trasbordo de droga, lejos de la jurisdicción española, donde la Guardia Civil no puede actuar.

Durante la operación, creen los investigadores, los delincuentes habrían arrojado al mar o extraviado algunos de los fardos, que ahora, arrastrados por las corrientes, han hecho su aparición en las playas de Benicàssim, Moncofa y también en la zona de Valencia.

Los hallazgos han causado una gran expectación entre los veraneantes. Y es que los primeros fardos llegaron a las playas Heliópolis y Almadraba de Benicàssim el pasado domingo. Fue ese día cuando el personal de la Escuela de Vela de la localidad encontró una zodiac varada y quemada. Ante la sospecha de que esta estuviera relacionada con la aparición de los fardos, la Guardia Civil se la llevó a sus instalaciones para examinarla, ya que, según Capitanía Marítima, esta carecía de titular registrado. Tras la inspección, la Benemérita, desvelaron estas fuentes, no ha hallado conexión con narcotraficantes.

La Guardia Civil continúa alerta a la espera de que nuevos fardos alcancen las playas de la provincia empujados por la marea. H