La acusada de matar a su marido en su casa de Torreblanca podría cumplir solo seis años de cárcel. Este es el acuerdo que han alcanzado la Fiscalía y el letrado de la defensa para A.D.E.C., la mujer que, supuestamente, acabó con la vida de su esposo a golpes con una barra y que ha podido conocer Mediterráneo en exclusiva.

La presunta autora de un delito de homicidio deberá, además, indemnizar en la suma de 10.000 euros a cada una de las cuatro hijas del fallecido, Francisco Pérez, de 72 años. Estas, mayores de edad todas, son fruto de un matrimonio anterior a la relación de la acusada con la víctima.

El juicio por los hechos, que tuvieron lugar en el 2012, debería haber comenzado hoy en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón. Un jurado popular debía decidir si declaraba culpable o inocente a A.D.E.C, pero el pacto entre las partes ha provocado que el juicio no llegue a celebrarse. El tribunal deberá dictar hoy sentencia con arreglo al acuerdo de conformidad.

ALTERACIÓN PSÍQUICA // En el contexto del pacto alcanzado entre las partes figura como atenuante la alteración psíquica que padece la acusada y que se ha acreditado mediante los informes forenses, según han revelado a este diario fuentes jurídicas.

Asimismo, también se ha tomado en cuenta el agravante de parentesco, pues aunque la pareja había puesto punto y final a su relación sentimental, continuaban casados legalmente y compartían el domicilio familiar.

Al parecer, la supuesta homicida había decidido retomar su convivencia con el fallecido, natural de Murcia, por un presunto interés económico. Esta se encontraba en desempleo, no percibía ninguna prestación y tomó la determinación de volver a vivir con su expareja por la pensión que este, que estaba jubilado, tenía.

Según apuntó el fiscal en su escrito de acusación provisional, el ataque mortal tuvo lugar el 19 de octubre del 2012. Encontrándose ambos en la casa que habían alquilado en la playa de Torrenostra (Torreblanca), se produjo una fuerte discusión entre ellos.

“La acusada cogió una barra de hierro de un centímetro de ancho por un metro de largo con la que golpeó a la víctima en el tórax”, explicó la Fiscalía, que sostuvo que, al intentar defenderse Francisco Pérez, ella sujetó el arma homicida y le propinó varios golpes en la cabeza, que le causaron, supuestamente, la muerte.

Tras acabar con su vida, dejó el cadáver de quien fuera su marido en el inmueble y se marchó. H