Doce de los 20 miembros de la red de heroína y cocaína desmantelada por la Policía Nacional de Castellón ya están en la cárcel. El juez ha decretado el ingreso en prisión preventiva por riesgo de fuga para más de la mitad de los integrantes, entre los que se encuentran los cabecillas de la organización criminal, que traía droga a la provincia y la distribuía al menudeo en distintos puntos.

Los otros ocho detenidos se encuentran en libertad con cargos y a la espera de juicio, en el que se les juzgará también por delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.

Los miembros de la banda tienen entre 23 y 66 años y 18 de ellos son vecinos de la provincia. Los agentes los detuvieron en tres fases y lograron incautarles tres kilos de heroína, uno de cocaína, otro de marihuana y 20.000 euros en efectivo. Los policías realizaron registros domiciliarios en Almassora, el Grao de Castellón, Vinaròs y Reus (Tarragona). En unos inmuebles que estaban preparados para la venta de droga y cuyas puertas se encontraban reforzadas con vigas metálicas para poder resistir en caso de un registro de la autoridad policial.

Según explicó la Policía Nacional, la banda contaba con vehículos especialmente diseñados para trasladar la heroína y la cocaína, con compartimentos especiales para ocultarla en los coches. H